Seamos entendidos en los tiempos y así discernir lo que Dios muestra
Y cuando oyeron nuestros enemigos que lo habíamos entendido, y que Dios había desbaratado el consejo de ellos, nos volvimos todos al muro, cada uno a su tarea. Nehemías 4:15 El relato en el libro de Nehemías es uno que vale la pena compartir. Nehemías fue de los tantos hombres que fueron llevados al exilio y ahí en medio de ese destierro, prosperó y cuando conocemos de él, lo vemos sirviendo al rey Artajerjes como el copero del palacio. En este tiempo, él se había ganado la confianza del rey y también la simpatía. Cuando Nehemías se entera de las condiciones existentes en Jerusalén, su corazón se compungió y su rostro enmudeció. En cuanto el rey se dio cuenta, le preguntó y Nehemías abrió su corazón y compartió su tristeza. Saben el favor de Dios no se hizo esperar. Artajerjes aprobó su viaje hacia Jerusalén con el objetivo de restaurar las murallas de la ciudad. Su travesía recibió la provisión necesaria para la obra, y la protección para el camino. Sin embargo, siempre vamos a encontrar oposición cuando estamos enfocados en honrar a Dios en nuestras vidas de una manera u otra. La oposición se manifestó por medio de varios personajes que trataron por todos los medios de intimidarlo para que cesara en su intento. Estos hombres que trataron de persuadirlo no deseaban que esa ciudad fuera reconstruida e hicieron planes para atacarla. Los que construían tomaron lugares: unos edificaban y otros se mantenían alertas con armas de defensa. Trabajaban y vigilaban; vigilaban y trabajaban y así el enemigo tuvo que desistir. La pregunta que nos podemos hoy hacer, ¿Qué tiene esto que ver con nosotros? Si analizas los tiempos que vivimos, te darás cuenta de que hay un ataque frontal contra todo lo que honre a nuestro Señor Jesucristo, y comienza con las familias, continúa con toda área de la sociedad: el gobierno, la educación, los medios de comunicaciones, las artes y ciencias y pudiera seguir, pero pienso que se dan cuenta hacia donde quiero llevarlos. Es el momento de tomar nuestra posición como hombres y mujeres de bien y buscar el rostro de Dios. Dice su Palabra que con Dios está la sabiduría y el poder; que suyo es el consejo y la inteligencia. Si la sabiduría está con Dios, y el principio de la sabiduría es el temor del Señor, entonces de ahí se desprende el verdadero conocimiento. Si comprendemos esta verdad ¿cómo estamos permitiendo que nuestros niños sigan siendo influenciados por principios contrarios a nuestras valores y creencias? Es el tiempo de que continúes construyendo tu hogar bajo los principios de Dios, sobre la roca y nada la derribará. Prepárate para ganar la batalla que hay en contra de todo lo que representa lo verdadero, lo honesto, lo justo, lo puro, lo amable y todo lo que es de buen nombre. Es hora de decir basta ya y no seguir prestando oído al temor. Tú tienes que saber que, con Dios de tu lado, todo es posible y en Él está tu fortaleza para pelear las batallas que tienes que enfrentar. Padre, que veamos lo que Tú ves, que nuestros ojos sean abiertos a todas las maquinaciones de los enemigos que están al acecho de nuestra generación y nuestra descendencia. Que seamos apercibidos a los tiempos que nos han tocado vivir, pero que entendamos que, si Tú estás con nosotros, quien puede venir contra nosotros en el Poderoso Nombre de Jesús. Lecturas recomendadas: Todo lo puedo en Cristo que me fortalece. Filipenses 4:13 Todo aquel que viene a mí, y oye mis palabras y las hace, os indicaré a quién es semejante. Semejante es al hombre que, al edificar una casa, cavó y ahondó y puso el fundamento sobre la roca; y cuando vino una inundación, el río dio con ímpetu contra aquella casa, pero no la pudo mover, porque estaba fundada sobre la roca. Lucas 6:47-48 Con Dios está la sabiduría y el poder; suyo es el consejo y la inteligencia. Job 12:13 El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza. Proverbios 1:7 |